Cada otoño, millones de mariposas monarca recorren casi 5000 kilómetros desde la zona noreste de los EE. UU. y Canadá hasta las montañas centrales de México. Al llegar a su destino, estas mariposas se refugian en las ramas de los árboles, donde hibernan hasta la vuelta de la primavera, momento en el que migran de nuevo rumbo al norte.