Hugo Westrelin

Háblanos un poco de ti.

Me llamo Hugo Westrelin y tengo 21 años. Nací el 15 de octubre de 2002 cerca de París, pero vivo en Biarritz desde que tengo un año. Aquí es donde he estudiado hasta bachillerato y donde he conocido a todos mis amigos.

¿Dónde estás ahora?

He pasado el verano entre París y Biarritz, lo que ha sido genial. Vivo en Biarritz con mi madre, pero desde hace tres años trabajo de vez en cuando en París. Es estupendo poder pasar tiempo en los dos sitios.

Háblanos de tu trayectoria en el skate.

Todo empezó gracias a mi expadrastro, que era un skater bastante bueno en su día. Cuando tenía dos años, él y mi madre me regalaron mi primera tabla. De hecho, aprendí a andar con ella utilizándola en la entrada de casa. Cuando tenía más o menos cinco años, mi madre me llevaba al skatepark todos los días después del colegio, y también al hospital bastantes veces… Decía que estaba loco, pero yo solo quería ser como los mayores. Allí conocí a los amigos con los que sigo haciendo skate a día de hoy. Desde entonces no hemos parado, y eso me hace muy feliz.

¿Cómo es un día normal en Biarritz?

Me suelo levantar sobre las 10, llamo a mis colegas, me pillo un café y me piro a Wall Street Skate shop para pasar un rato con los amigos que trabajan allí. Si lo necesito, preparo una nueva tabla o recojo algunos paquetes. Si hay olas, hago surf; si no, igual jugamos al golf antes del mediodía. Vamos a comer algo (que no suele ser ninguna opción saludable) y luego salimos a hacer skate, ya sea al skatepark o a la calle, según nos apetezca ese día. Después, solemos relajarnos viendo la puesta de sol y, si aún nos quedan fuerzas, nos tomamos unas cervezas para terminar el día con el mejor sabor…

Describe la escena local.

En el suroeste de Francia, tenemos la suerte de contar con una escena de skate muy consolidada. Y lo mejor de todo es que todo el mundo patina por diversión, sin ningún tipo de envidia, lo que no siempre ocurre en otras ciudades. Mis amigos, Tim Debauche, Daniel Porto Raya y Noah Mahieu, tienen un talento increíble, así que hacer skate con ellos me lleva a dar lo mejor de mí para mejorar constantemente. Además, uno de mis mejores amigos, Ruben Delisle, es cineasta de skate, lo que supone un gran impulso para nuestros proyectos. Y encima, Clement Legall, el legendario fotógrafo, también vive aquí; o sea que todo cuadra.

También tenemos una generación mayor de skaters con talento que lo petaron en su día. Samuel Partaix, en particular, ha contribuido mucho a la escena local. Es uno de los profesionales que se trasladó a Biarritz y está bastante implicado en la cultura local del skate.

Desde hace unos años, tenemos la suerte de contar con una tienda en la ciudad, Wall Street, que nos ha sido de gran ayuda. Emilie, la jefa, ¡está haciendo cosas increíbles por nosotros!

Merci Emilie!

¿Cuáles son tus lugares favoritos para hacer skate fuera de Biarritz?

Diría que el lugar donde más patinamos después de Biarritz es España, a menudo vamos en misiones de rodaje a San Sebastián, Bilbao y los alrededores. Estamos muy cerca de la frontera, a solo 20 minutos en coche, así que es muy cómodo. Es una pasada la cantidad de lugares que hay en España. Es mi lugar favorito para hacer skate.

¿En qué has estado trabajando últimamente?

Ahora mismo, Ruben y yo estamos trabajando en un proyecto en solitario. Llevamos en ello más de un año, y aún queda trabajo por hacer, pero es genial: nos encanta trabajar juntos.

¿Cómo describirías el rollo del equipo de skate de Vans?

Encarna todo lo que me gusta: no hay estrés, solo buen rollo y gente que patina muy bien. Me recuerda a aquellas sesiones en el skatepark de cuando teníamos siete años, riéndonos todo el día sin sentirnos nunca presionados a hacer nada que no quisiéramos. La única diferencia ahora es el nivel de habilidad sobre la tabla... Desde que era niño, solo he hecho skate con Vans, así que estoy muy agradecido de formar parte ahora del equipo de Europa. ¡Estoy deseando salir de gira y disfrutar de cada momento!

¿Qué y quién te inspira en el skate?

Es difícil de explicar, pero la mayoría de las veces llego al skatepark y me viene una idea a la cabeza. Lo pruebo; si funciona, bien; si no, espero a la siguiente idea. Sé que algunas personas tienen planes muy específicos, pero no me gusta obsesionarme demasiado con eso.

A veces, Ruben me sugiere algo en plan: «Oye, deberías probar esto», y suelto: «Sí, ¡no es mala idea!» Así es cómo aprendo nuevos trucos sobre la tabla. Hay skaters a los que admiro más que a otros, y pillo nuevas ideas viéndoles hacer skate. En realidad no tengo ningún skater favorito propiamente dicho, pero ahora mismo, tipos como Chris Milic, Joseph Campos, Stu Kirst y Rowan están haciendo que me guste aún más el skate.

Y fuera del skate, ¿qué te entusiasma?

Últimamente jugamos mucho al golf, que me gusta bastante. El verano en Biarritz está guay para salir de fiesta, así que eso también... Me encanta estar al aire libre con mis amigos y hacer todo tipo de cosas, ahora estamos practicando mucho ciclismo, intentamos ir de excursión y acampar en las montañas cuando podemos, por lo demás me encanta hacer surf, pescar y jugar al golf, cualquier actividad al aire libre que implique pasar tiempo con la gente que quiero.

¿A quién admiras?

La verdad es que no tengo ningún skater favorito propiamente dicho, pero ahora mismo, tipos como Chris Milic, Joseph Campos, Stu Kirst y Rowan están haciendo que me guste aún más el skate. También leyendas como GT e Ishod Wair: los he visto un millón de veces.

¿Tus Vans favoritas para hacer skate?

¡Las Old Skool! ¡De cualquier color!

¿Cuáles son tus planes y objetivos para el futuro?

La verdad es que no me marco ningún objetivo, prefiero vivir y disfrutar de la vida con mis amigos, mi familia y creo que las cosas vienen de forma natural si te lo mereces y trabajas duro.
Me gustaría seguir patinando el mayor tiempo posible, viajar todo lo que pueda y gozar de buena salud, para poder seguir haciendo las cosas que me gustan.

¿Algo que añadir?

Diles a tus colegas que los quieres antes de que sea demasiado tarde.