Mia Brookes

En el mundo del snowboard, donde las medallas olímpicas son la medida habitual del éxito, Mia Brookes es la criptomoneda.

Mia es una snowboarder con mucho talento que, pese a su juventud, ha destacado por encima de muchas otras figuras con más experiencia sobre la tabla. Aunque se formó siguiendo el sistema tradicional de competiciones, mantiene intactas sus raíces anárquicas, gracias a sus padres y a todas sus escapadas a la nieve que solían hacer en los inviernos de los años 90, cuando la escena del snowboard comenzaba a despuntar en el Reino Unido. Su ascenso al estrellato ha sido, en una palabra, estratosférico, y ha logrado el título de campeona mundial más joven de la historia en 2023, con solo 16 años. Su estilo y talento, marcados por su herencia y su desinterés por lo que piensen los demás, han influido en los jueces para que ahora valoren tanto el estilo como la dificultad. Su estilo sobre la tabla es todo un baluarte de esperanza para el futuro, sobre todo teniendo en cuenta que compite en las finales con chaquetas de cuero en vez de licra... Mia es todo lo bueno del snowboard en 2025.

¿Dónde estás ahora?

Ahora estoy de vacaciones en Laax. La temporada de la Copa del Mundo está a punto de empezar otra vez, así que está bien estar aquí con mis compañeros. Hay muy buen rollo entre la gente, no hay demasiada presión. Los demás participantes de la competición, el equipo que está allí para hacerse las barandillas... todos formamos una gran familia. Cuando era más pequeña solía pasar mucho tiempo aquí, ahora con los compromisos del Mundial y demás es más difícil pasar mucho tiempo en un mismo sitio, pero es un lugar muy especial para mí y me encanta volver.

Háblanos un poco de ti.

Empecé a hacer snow cuando tenía 18 meses, así que desde muy niña. Crecí haciendo snow con mis padres, sobre todo en Francia. Nos íbamos de vacaciones varias veces al año a hacer snow sin parar. Creo que cuando tenía seis o siete años empezamos a tomárnoslo más en serio y alrededor de los nueve o diez ya nos centramos en competir durante más temporadas.

Háblanos de tu trayectoria en el snow hasta ahora.

¡Ha sido un viaje de locos! Empecé de muy niña, tenía unos 9 años cuando entré en el equipo de GB. Creo que empecé a competir en Copas de Europa cuando tenía unos 13 años, y luego pasé a los Mundiales a los 15. Ha sido todo una locura para tan poco tiempo.

¿Cómo es eso de ser del Reino Unido?

Desde luego, es todo un reto ser de un país donde no hay ni una sola montaña. Pero también creo que eso puede ser una ayuda, ya que cuando estoy en casa ni siquiera pienso en hacer snow, no me siento presionada, así que naturalmente quiero ir a la montaña y me siento inspirada para hacer snow. Incluso sin las montañas, la escena del snowboard en el Reino Unido es tan grande como dinámica, es un honor representar a toda la comunidad a nivel mundial.

¿Qué y quién te inspira en el snow?

Diría que me inspiro en el estilo de Dusty Henricksen, pero también en el de Rene Rinnekangas, porque es muy creativo. Al venir de una familia donde se hacía snow, todas las películas Forum de los 90 fueron siempre una fuente de inspiración: un estilo increíble. Valoro a quienes dan su toque personal de estilo a las cosas. Esa libertad para enfocarlas desde diferentes ángulos es una parte esencial del snow.

¿Y fuera del snow? ¿Qué te gusta?

Tocar la guitarra. Me encanta la música, 100 %, sobre todo el heavy metal. También me gusta mucho hacer skate. Veo muchos conciertos en los aviones, me anima mucho. La música se convirtió en una de mis grandes obsesiones hace un par de años o así. Durante estos dos años, he evolucionado mucho musicalmente hablando, he descubierto muchos grupos nuevos que nunca me hubiera imaginado.

Creo que el snow y la música comparten muchas cosas. Según lo que esté pasando, la música tiene un efecto muy distinto. Antes de una competición escucho música heavy y música de ritmos rápidos para meterme en el rollo. Creo que cuando compites en una gran final de Big Air, sobre todo por la noche, sientes un subidón como si estuvieras dando un concierto ante una gran multitud.

Kurt Cobain es, sin duda, alguien a quien admiro mucho. El hecho de que hiciera lo que quería si importarle lo que pensaran los demás era increíble, y también el impacto de su música, que dio paso a una nueva generación de personas y estilos. Creo que en ese sentido la música y el snow comparten muchas cosas.

Si solo pudieras tener una guitarra o una tabla de snowboard, ¿qué elegirías?

El snowboard es obviamente algo muy especial, pero la cantidad de veces que he soñado con tocar en un enorme estadio lleno de gente.... ¡Sin comentarios!

¿Alguna formación soñada de guitarrista, cantante, batería, bajista?

Buena pregunta... Guitarrista, diría que Dimebag Darrell o igual Wes Borland. Cantante, Layne Stanley, Chris Cornell o Kurt Cobain. Batería; definitivamente Joey Jordison y en el bajo, Cliff Burton.

Acabas de ganar la gran copa del mundo de Big Air en Austria, ¿nos lo cuentas?

Gané la última en Pekín, que fue una auténtica pasada. Fui con la misma mentalidad, no me preocupaba demasiado ganar, solo quería mostrar lo que podía hacer y enseñar mis trucos, lo que acabó funcionando. Ha sido una locura ganar dos pruebas seguidas, no podía estar más contenta. Cuando era más pequeña me estresaba mucho con las competiciones, ahora me he relajado. Si no lo consigues, pues nada, no pasa nada. Esfuérzate al máximo, disfruta y diviértete. Me costó mucho tiempo aprenderlo.

¿Y llevarás esa mentalidad a las Olimpiadas?

Por supuesto, tengo muchas ganas de ganar una medalla de oro olímpica, y creo que, después de la racha que he tenido, hay mucha presión al respecto. Sin embargo, me siento contenta de tener una mentalidad más relajada y de poder desconectarme de todo lo que no importa.

¿Has sufrido alguna lesión importante?

Tuve una conmoción cerebral bastante fuerte hace un par de años, en 2021, al final de la temporada. Cogí el canto de la puntera al salir en el último salto en Corvatsch y me tuvieron que sacar en helicóptero. Lo último que recuerdo antes es haber llamado a mi padre en el ascensor para decirle que grabara el salto del medio y lo siguiente que recuerdo es estar haciéndome la resonancia magnética. Fue un final de temporada bastante abrupto y no pude subirme a la tabla ni hacer nada durante 3 meses, así que sí, ese verano no fue el mejor.

Aparte de las competiciones, ¿qué más te gusta de hacer snowboard?

Todo, la parte creativa y de rodaje, me mola mucho. Me encanta rodar, elegir la música... todo ese proceso creativo me mola mucho. Me encanta la moda del snow, te permite expresarte a tu manera muy bien. Todo lo relacionado con el snowboard de los 90 y principios de los 2000 me chifla. Después de las competiciones, me encantaría dedicarme más a la calle y a hacer snow fuera de pista. El snowboard es una cultura muy bonita y completa, me encanta.

¿Cómo describirías el rollo que hay en el equipo de snow de Vans?

Que Will Smith y Sparrow llevaran Vans en el Reino Unido fue toda una fuente de inspiración para mí... Siempre tuve claro que Vans era la marca que debía llevar. Cuando me invitaron a formar parte del equipo fue un gran momento, ¡crecí soñando con estar en Vans! El equipo de Vans está lleno de gente estupenda y formar parte de él ahora mismo es algo muy especial.

¿Tus botas Vans preferidas?

¡Uso las Encore Pro, que son una auténtica locura! Las recomendaría literalmente para todo en la montaña, son las botas perfectas.

¿Algo que añadir? ¿Un mensaje para internet? ¿Un mensaje a tu antiguo yo?

Disfruta de todo lo que la vida te dé, puede que en ese momento sea un asco, pero un día mirarás atrás y te darás cuenta de que todo ha merecido la pena. Todo forma parte del camino. Saca también tiempo para salir del parque e ir a comerte las pistas con tus compañeros. Es lo mejor.