Un prodigio callejero versátil, un competidor olímpico, finalista en los X Games en la modalidad de slopestyle, ganador del DIYX y un tipo genial en todos los sentidos con una de las mentalidades más positivas que existen.
Si has seguido el snowboard en los últimos años, Rene Rinnekangas es un nombre que necesitará poca presentación. Si no lo has hecho, por dónde empezar… Aparte de ser uno de los mejores snowboarders, Rene es un auténtico pionero en los tiempos que corren, un regreso a los días gloriosos en los que cualquier cosa valía para hacer snow. Un prodigio callejero versátil, un competidor olímpico, finalista en los X Games en la modalidad de slopestyle, ganador del DIYX y un tipo genial en todos los sentidos con una de las mentalidades más positivas que existen. Un portento natural e increíble, heredero de un largo legado de consumados snowboarders finlandeses años antes de su época, llamamos a Rene para hablar de las inspiraciones familiares, el punk rock, los próximos proyectos y el lugar especial que el DIYX ocupa en su corazón. Pura energía.
Para los que no te conocen, preséntate.
Me llamo Rene Rinnekangas, tengo 25 años y soy de Lisalmi, Finlandia, casi en medio del campo, un pueblo, diría yo. Allí crecí haciendo snowboard.
¿Dónde estás en estos momentos?
Ahora mismo, estoy en Ruka, a unas cuatro horas al norte de donde vivo. Creo que es uno de las mejores estaciones de Finlandia, y me encanta pasar tiempo aquí. Además, acaban de abrir el parque para las sesiones de principio de temporada, así que he estado haciendo snowboard un montón ¡y jugando un poco al hockey!
¿Qué más has estado haciendo últimamente?
Estuve en casa, en Lisalmi, prácticamente todo el verano, probablemente solo haya salido en un par de ocasiones los últimos meses. Cuando no estoy haciendo snowboard, me gusta mucho estar allí y estar en un sitio. No es una ciudad muy grande: viven unas 20 000 personas. Es un lugar muy tranquilo. Está genial ver a mis padres y a mi hermano y estar un poco de tranqui.
Háblanos de tu trayectoria en el snow.
Viene de familia. Mi hermano empezó a hacer snowboard más o menos un año antes que yo, y es cinco años mayor que yo, así que cuando empecé tenía unos cuatro años. Sentía que todo lo que él hacía, tenía que hacerlo yo exactamente igual… es una gran inspiración para mí como snowboarder, y en la vida en general.
Era muy bueno haciendo grandes trucos y cosas así sobre una tabla de snow y se apuntaba a concursos, así que yo también me apunté a concursos gracias a él. Luego empezó a filmar, así que yo también empecé a hacerlo gracias a él. La verdad es que es muy gracioso, porque he seguido sus mismos pasos. Hasta los colegas con los que grabo eran amigos suyos al principio; Anton Kiiski y Tatu Toivanen. Yo tenía probablemente 10 años, y ellos 15 cuando empezamos a grabar juntos. Y todavía filmamos con la misma gente. Significa mucho para mí pasar tiempo con la misma peña y poder hacer esto cuando seamos un poco mayores.
¿Cuáles han sido los momentos más destacados de tu carrera hasta ahora?
En cuanto a concursos, diría que la primera vez que tuve la oportunidad de participar en los X Games. Era lo que siempre había soñado. La primera vez que tuve la oportunidad de participar en los X Games, fue muy especial, porque invitaron a mi hermano y a nuestro grupo, en el que también toco. Después de la competición de slopestyle hubo una fiesta en lo alto de la montaña en la que pudimos tocar algo de punk rock, diría que fue uno de los mejores días de mi vida.
En lo que no respecta a concursos, hemos estado grabando con el mismo equipo, realizando algunos proyectos de vídeo juntos; uno se llama Sugared y salió hace unos tres años. Ese fue nuestro primer proyecto más grande y estamos muy emocionados al respecto. Este otoño va a salir uno nuevo llamado Heaven, ¡y pronto va a ser el estreno en Helsinki y luego en Estocolmo!
Háblanos más de Heaven
Más o menos después de las últimas Olimpiadas de 2022, Anton, Tatu y yo, el mismo equipo con el que hemos estado rodando durante algún tiempo, empezamos un nuevo proyecto, un concepto similar al de Sugared. Una mezcla de snowboard callejero y fuera de pista, y también algo de snow fuera de pista en primavera. Siento que este es un poco más especial, porque nuestro plan era hacerlo en un año y medio al principio; pero después del primer año me lesioné: me rompí el tobillo, así que tuve que tomarme un descanso, y luego lo retomamos la temporada pasada. Está guay hacer estas cosas con mis colegas, y estamos muy agradecidos por todos los que nos apoyan.
¿Cómo describirías la escena finlandesa en general?
En Finlandia, en general, tenemos una escena de snowboard bastante buena, sobre todo para hacer snow en la calle. Aún pueden echarte del lugar, pero normalmente puedes hablar con la peña y lo entienden. Probablemente lo hayan visto un poco, o incluso bastante, en Finlandia. El snowboard y los deportes de nieve en general son algo muy importante en Finlandia, están muy arraigados en nuestra cultura.
Finlandia es un país bastante pequeño y no sé muy bien por qué, pero ha habido snowboarders muy buenos procedentes de Finlandia y la gente tiene sus diferentes ídolos. Para mí fue Eero Ettala, de tanto verlo en la tele cuando tenía su propio programa. Hoy en día está guay ver a gente de todo el mundo que viene a Finlandia a grabar sesiones de snowboard callejero, es impresionante verlo.
Creo que Finlandia moldea tu estilo de snow de forma diferente, hay mucho snowboard callejero, ya que es lo que crecimos haciendo.
¿Cómo te sientes mezclando concursos y piezas de vídeo?
A mí me va bien, me encanta. Llevo haciéndolo así desde que era bastante joven, probablemente desde los 10 años. Siempre me han gustado mucho los vídeos y hacer concursos. Siempre ha sido una parte importante de mi forma de hacer snowboard y está muy bien mezclarlo. Cada vez que salto de la calle a un concurso, me siento realmente entusiasmado por volver a hacer esos trucos de concurso; en lugar de hacer una sola cosa toda la temporada, creo que funciona muy bien mezclarlo. Todo vuelve a parecer nuevo. Hay muchas movidas que puedes aprender de las dos cosas y aplicarlas en cada una de ellas. Siempre me han gustado la peña que pueden hacer snow sobre todo tipo de cosas; creo que así era el snowboard en su día, y es genial ver que sigue existiendo.
¿Qué significa DIYX para ti?
Significa mucho, sin duda.
Llevo ya tres años seguidos, y mola mucho ver que a tanta gente le gusta reunirse para celebrar este tipo de eventos en el snowboard. Creo que es muy importante para el deporte y es una pasada ver a cuánta gente le entusiasma el snowboard. Yo ni siquiera lo llamaría concurso, porque es totalmente diferente a hacer una Copa del Mundo… Creo que los concursos de antaño probablemente solían ser un poco más como el DIYX: es un concepto increíble.
¿Qué te inspira en el snowboard?
La peña que puede hacer snow sobre cualquier cosa. Yo era un gran admirador de mi hermano: siempre estaba haciendo snow sobre cualquier cosa. Me entusiasma la idea de hacer snow lo mejor que pueda, es decir, no pensar demasiado en los trucos, sino en el control de los cantos y demás. Ver a gente que es increíblemente buena haciendo ese tipo de cosas, como Arthur Longo, que hace cosas realmente hermosas sobre una tabla de snowboard. Aunque solo sea pillar aire, es increíble, y se nota lo bueno que es sobre la tabla. Lo curioso es que ni siquiera parece que se esfuerce demasiado, parece que simplemente va a velocidad de crucero, pero va tan rápido que es realmente difícil seguirle, su control de los cantos es muy bueno. Eso me inspira. Siempre que estoy haciendo snow en una estación, me gustaría poder hacer snow como él, intentar encontrar diferentes golpes laterales y simplemente ¡aprender y mejorar!
¿Qué te inspira más allá del snowboard?
Me encanta el snowboard. Eso también ha sido siempre algo importante para mí. Y hay un montón de cosas del snowboard que me vienen del skate, y me encanta esa parte de hacer ambas cosas y mezclar las ideas. También me encanta formar parte del grupo de mi hermano y tocar música. Me encanta la sensación esa de cuando tienes un concierto, es una emoción muy intensa, como estar nervioso, pero una sensación totalmente distinta a estar nervioso haciendo snowboard. Últimamente, estoy muy entusiasmado con el hockey, es muy divertido y un deporte muy bueno en el que hacer mazo de ejercicio. Es un clásico ir a la pista de hielo con el equipo con el que juego, hay gente de 20 a 60 años. Está genial que haya tantas edades diferentes y escuchar todas las historias y chistes de las distintas edades y etapas de la vida.
¿Algo que añadir?
Gracias a vosotros y a Vans por apoyar lo que más me gusta hacer. Gracias a mi hermano por inspirarme siempre y a mis queridos amigos Anton y Tatu, es tan divertido hacer proyectos con tus mejores amigos.
